desperté en el momento en que me sacaba la aguja que me clavó el sujeto mientras trataba de contener sus embates en la puerta de mi casa. recuerdo haberme empezado a sentir mareada y somnolienta, haber gritado auxilio mientras trataba de llamar al último número en mi celular, y pensar que tenía todas las otras puertas con pestillo. me quedaba dormida con la esperanza de que no lograría abrir ninguna (y abrí los ojos).
No hay comentarios:
Publicar un comentario